En un viaje a Praga, uno de los más fantásticos e importantes atractivos turísticos monumentales es sin duda el Castillo de Praga.

Praga es un destino perfecto para viajes románticos y con los amigos, que nos ofrece la posibilidad de alojarnos en una gran variedad de típicos hoteles de Praga, hostales y pensiones, apartamentos y otras muchas alternativas con encanto para pasar un fin de semana o unas vacaciones en la República Checa.

Una de las visitas más importantes de Praga es el Castillo de Praga, la mayor fortaleza medieval del mundo. Un interesante viaje al s. IX, a las profundidades del corazón de la Edad Media, y que nos abre paso a tres de las maravillas de Praga, el Palacio Real, el Convento de San Jorge y la mágnífica Catedral de Praga. La Catedral de Praga, llamada de San Vito, impresiona hasta tal punto que sus visitantes la comparan con la catedral de Notre Dame, la más famosa del mundo. Por otro lado, el Convento de San Jorge encontramos una riqueza cultural interesantísima, ya que es sede de la magnífica colección de Arte Antiguo de la Galería Nacional Checa, una visita indispensable en un viaje a Praga. Y de la cultura a la melancolía, ya que también podemos visitar el curiosísimo Museo del Juguete de Praga, con una colección de muñecos de todas las épocas, tanto de Europa como de América. El Palacio de Praga nos invita a maravillarnos con sus espectaculares salones (encontramos el mayor salón gótico europeo), las galerías y los decorados, la contrucción y la impresionante arquitectura que hace del Palacio de Praga un lugar reconocido por su interés y belleza en toda Europa. Y de aquí a la magnífica Calle del Oro, un barrio bohemio que nos ofrece la guinda de nuestro viaje a Praga.